La microdosis de cannabis: THC, el principal componente psicoactivo del cannabis, para obtener sus beneficios terapéuticos sin experimentar efectos psicoactivos intensos1. Algunos usos y beneficios de la microdosis de cannabis:
- Alivio de la ansiedad: Se ha reportado que las microdosis pueden aliviar la ansiedad sin los efectos adversos que a veces se asocian con dosis más altas, como la paranoia1.
- Manejo del dolor crónico: El THC en dosis bajas puede ayudar a reducir el dolor crónico1.
- Mejora del enfoque en personas con ADHD: Algunos estudios sugieren que las microdosis pueden ayudar a mejorar la concentración en personas con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (ADHD)1.
- Reducción del estrés: Las microdosis pueden proporcionar una sensación de calma y ayudar a manejar el estrés diario1.
- Disminución de la inflamación: El THC tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ser aprovechadas en microdosis1.
- Ayuda con la indigestión: Puede mejorar la digestión y aliviar problemas estomacales1.
- Tratamiento de trastornos del ánimo: Las microdosis pueden tener un efecto positivo en el estado de ánimo y ser útiles en el tratamiento de ciertos trastornos del ánimo1.
- Potencial uso en Alzheimer: Aunque se necesita más investigación, hay indicios de que las microdosis de cannabis podrían ser beneficiosas en el tratamiento del Alzheimer1.
Es importante destacar que el uso de cannabis, incluso en microdosis, debe ser supervisado por un profesional de la salud.