Conversamos con Vero del barrio Los Pioneros, que nos cuenta cómo lograron desde la agrupación vecinal Pioneros por el Agua, dar de baja la cautelar y poner en vigencia la ordenanza que prohíbe las fumigaciones terrestres a menos de 1000 metros de cualquier vivienda, escuela o curso de agua.

Hola, Joha. Bueno, esta causa es una causa que comenzó en el 2012, que es de Rossiter contra el municipio a raíz de la ordenanza que se aprobó en el 2011, donde prohíbe las fumigaciones aéreas y las terrestres las aleja a 1000 metros de zona urbana, peri urbana, escuelas, centros de salud, etcétera. En su momento le habilitaron la cautelar a los Rossiter, o sea, se le habilitaron para fumigar a 30 metros de zona urbana y de escuelas. En el 2021, cuando nosotros comenzamos, presentamos los análisis que teníamos a la jueza, nos acercamos a hablar con ella para saber cuál era la situación de la causa y la jueza en ese momento toma la decisión de revisar la causa de Rossiter a partir de las pruebas que nosotros habíamos acercado de análisis que teníamos y le levanta la cautelar. Rossiter apela esta decisión y eso pasa al Juzgado de San Nicolás de Segunda Instancia. El Juzgado de San Nicolás le da una prórroga de tres meses para que siga fumigando y tenía que presentar justificaciones, y Rossiter no presentó nada. El municipio en ese momento, con la resolución de San Nicolás, apela y eso llega a la corte.


Como ya se había terminado el plazo de los tres meses que había puesto el juzgado de San Nicolás, presentamos una nota para que se lo declara abstracto. Así que el juzgado termina decidiendo que más allá de lo que apela Rossiter, la jueza de primera instancia había decidido a partir de otra causa, que es la de Zocca, la Corte dice ” Bueno, sí puede ser que haya tomado esa decisión, pero la ordenanza está avalada en otros derechos que tienen que ver con la cuestión precautoria de salud y ambiente.”

Entonces, la Corte ratifica la sentencia de la jueza de primera instancia, con lo cual, en este momento estaría vigente en su totalidad la ordenanza municipal que nos resguarda a 1000 metros de las fumigaciones.

Si bien es buenísimo el fallo y estamos súper contentos, ahora se nos viene la pelea con el municipio para que lo haga cumplir y que no autorice ninguna fumigación y que controle que se haga a la distancia que dice la ordenanza y no más cerca. Eso es algo que vamos a tener que ver cómo lo encaramos, porque sabemos que el municipio no controla, deja pasar todo y mira para otro lado.


Y bueno, las consecuencias son muchas porque van a seguir fumigando y los problemas de salud y el daño que hacen al ambiente van a seguir estando y los van a seguir provocando. Pero bueno, hoy estamos muy contentos con ese fallo, pero con la cabeza pensando en cómo seguir, porque esto supuesto que no se termina. Nunca lo legal es la única vía y sabemos que la lucha tiene que ser en las calles y la cabeza de la gente tiene que cambiar y dejar de aprobar este sistema de producción que no nos lleva a ningún lado.